Supergranulación

La supergranulación se ha interpretado durante mucho tiempo como una escala de convección específica, pero su origen no se conoce con precisión. Aunque la presencia de gránulos en la fotosfera solar es un fenómeno bien documentado, todavía hay mucho debate sobre la verdadera naturaleza o incluso la existencia de patrones de granulación de orden superior. Algunos autores sugieren la existencia de tres escalas distintas de organización: granulación (con diámetros típicos de 150-2500 km), mesogranulación (5000-10000 km) y supergranulación (más de 20000 km). Los gránulos se consideran típicamente como señales de células convectivas que forman una estructura jerárquica: los supergránulos estarían así fragmentados en sus capas superiores en mesogránulos más pequeños, que a su vez se dividirían en gránulos aún más pequeños en su superficie. El material solar fluiría hacia abajo en «carriles» oscuros que separarían los gránulos, siendo las divisiones entre los supergránulos las mayores concentraciones de gas frío, análogas a los ríos que conectan afluentes más pequeños. Sin embargo, hay que subrayar que esta imagen es muy especulativa y podría resultar falsa a la luz de futuros descubrimientos. Estudios recientes muestran algunas pruebas de que la mesogranulación fue una característica fantasma causada por procedimientos de promediación.