¿Qué altura tenía Adán?

Pregunta: «¿Qué altura tenía Adán?»
Respuesta: La Biblia no dice nada sobre la altura de Adán. Esto puede parecer un tema extraño para una pregunta, pero hay algunos que especulan que Adán y Eva en realidad fueron creados mucho más altos que el humano promedio de hoy. Según una teoría, Adán y Eva medían unos 4,5 metros.
Las teorías de un Adán de gran tamaño parten del hecho de que la gente antes del diluvio vivía vidas extraordinariamente largas (Adán vivió hasta los 930 años, según Génesis 5:5). También existe la suposición de que Adán fue creado con un intelecto superior. A lo largo de los siglos después de la caída, la humanidad ha disminuido en longevidad, en intelecto y -por extrapolación- en altura.
La presencia de animales e insectos muy grandes en el registro fósil apoya la teoría de que Adán era muy alto. En 1940, se desenterró en Oklahoma el ala fosilizada de Meganeuropsis americana. Este insecto parecido a una libélula tenía una envergadura de casi dos pies y medio (Harvard Magazine, Nov-Dic 2007, «DRAGONfly», www.harvardmagazine.com, consultado el 20/5/20). En 2020, se encontraron fósiles de tortugas gigantes en el norte de Sudamérica: el caparazón de Stupendemys geographicus mide casi nueve pies y medio de largo, unas 100 veces el tamaño de su pariente vivo más cercano (The Washington Post, 13 de febrero de 2020, «Turtles the Size of a Car Once Roamed the Earth. Scientists Just Found Their Fossils», Reis Thebault, www.washingtonpost.com/science, consultado el 20/5/20). Los que conjeturan que Adán era más alto que el hombre moderno razonan que, si los animales eran extra grandes en tiempos «prehistóricos», ¿por qué no los humanos?
Otra «evidencia» que sugiere que Adán era de gran altura es la mención de «gigantes» en la Biblia: los amorreos de Canaán, los refaítas y Goliat el filisteo, por ejemplo. Al encontrarse con el pueblo de Canaán, la mayoría de los espías israelitas afirmaron que «la tierra que exploramos devora a los que viven en ella. Todos los pueblos que vimos allí son de gran tamaño» (Números 13:32). Amós afirma que los amorreos eran altos de estatura, comparándolos hiperbólicamente con altos cedros (Amós 2:9). Un refaíta, el rey Og de Basán, que se opuso a los israelitas en tiempos de Moisés, también es descrito como un gigante en la Biblia, ya que tenía una cama de «más de nueve codos de largo y cuatro de ancho» (Deuteronomio 3:11). Si la cama coincidía con su estatura, entonces Og podría haber medido alrededor de 13 pies. Además, se describe que Goliat medía seis codos y un palmo, es decir, más de nueve pies de altura (1 Samuel 17:4). ¿Podría la gran estatura de estos personajes históricos ser un efecto residual de la genética de Adán? Algunos dicen que «sí».
También hay casos de gigantismo en humanos. A Robert Wadlow se le midió 8 pies y 11,1 pulgadas antes de su muerte en 1940 («The Tallest Man Ever», www.guinnessworldrecords.com, consultado el 20/5/20). Sin embargo, es dudoso que personas como Wadlow sean la prueba de que Adán era tan alto: el gigantismo moderno es un trastorno físico, y los individuos que crecen hasta alturas excesivas casi siempre luchan con problemas cardíacos y circulatorios.
La idea de que Adán era un gigante también encuentra apoyo en el Islam, aunque la tradición islámica adopta una visión extrema. En el hadiz, Abu Huraira relata que «el Profeta dijo: ‘Alá creó a Adán, haciéndole medir 60 codos'» (Sahih al-Bukhari, Libro 55, Hadiz 543). Esto haría que Adán midiera unos 90 pies.
A pesar de hacer algunas afirmaciones intrigantes, la teoría de que Adán y Eva eran gigantes no tiene ninguna evidencia bíblica que la apoye. No tenemos ninguna pista en las Escrituras sobre la altura de Adán. Ha habido casos históricos de personas que han crecido mucho, pero utilizar esas anomalías para proponer una altura específica para Adán no está justificado. Y extrapolar la altura media del hombre basándose en el tamaño de insectos y reptiles extintos implica una cantidad similar de conjeturas.