¿Pueden los perros ser bipolares?

Según los expertos veterinarios, los perros tienden a cambiar de emociones en reacción a un factor o situación externa. La bipolaridad, en cambio, es un trastorno bioquímico y los perros no tienen este tipo de respuesta bioquímica que les haga pasar de un estado de ánimo alto a uno bajo en rachas repentinas.

Puede que haya pensado que su perro sufre este tipo de trastorno debido a los signos que ha detectado. Por ejemplo, tal vez su perro es normalmente feliz y alegre pero se ha vuelto gruñón y agresivo. Es más probable que esto sea el resultado de otra condición que le esté causando dolor o de algún factor externo que lo haya hecho infeliz, como una nueva mascota en la casa.

Es importante no leer mal las señales si su perro sufre un cambio de humor. Muchos perros tienen sus días libres en los que estarán cansados, malhumorados o retraídos. Esto no significa que sean bipolares, aunque podría clasificarse como un cambio de polaridad si de repente pasan de un estado a otro. Por ejemplo, si su perro está jugando felizmente pero luego ve a otro perro y se asusta o se vuelve agresivo, esto podría ser clasificado como un cambio de polaridad pero no de la misma manera que el trastorno bipolar.

Hay ciertos signos de lenguaje corporal que su perro puede mostrar cuando su estado de ánimo cambia repentinamente, pero como se mencionó anteriormente esto es a menudo una reacción a algo externo. Esto podría incluir volverse retraído con sus orejas hacia abajo, mostrando sus dientes y volviéndose repentinamente agresivo, acostándose con poca o ninguna energía, o lloriqueando y tratando de llamar su atención.

Esto podría indicar que el perro se ha encontrado con una situación que no le gusta, como un extraño u otros animales, o que tiene una lesión o condición que le está causando dolor. Si se trata de un factor externo puede durar sólo un corto período de tiempo hasta que la amenaza o la situación disminuya.

Algunos perros pueden sufrir neurosis y a veces el problema podría ser de comportamiento. Algunos signos que su perro puede mostrar y que pueden imitar la bipolaridad incluyen cambios de humor repentinos, comportamiento agresivo, volverse retraído y temeroso, o volverse totalmente distante y desinteresado.