Plantas de trébol carmesí – Consejos para cultivar trébol carmesí como cultivo de cobertura

Pocos cultivos de cobertura de fijación de nitrógeno son tan impresionantes como el trébol carmesí. Con sus flores cónicas de color rojo carmesí brillante sobre tallos altos y lanosos, uno podría pensar que un campo de trébol carmesí fue plantado puramente por el atractivo estético. Sin embargo, esta pequeña planta es un duro caballo de batalla en la agricultura. Continúe leyendo para obtener más información sobre el trébol carmesí.

Información sobre el trébol carmesí

El trébol carmesí (Trifolium incarnatum) es originario de la región mediterránea. También llamado trébol encarnado por sus flores de color rojo sangre, el trébol carmesí se ha utilizado como cultivo de cobertura en Estados Unidos desde mediados del siglo XIX. Aunque no es una especie autóctona, el trébol carmesí también se ha convertido en una importante fuente de néctar para las abejas y otros polinizadores en EE.UU.

Las plantas de trébol carmesí se cultivan como cultivo de cobertura anual y, al igual que otros miembros de la familia de las leguminosas, fijan el nitrógeno en el suelo. Lo que diferencia al trébol carmesí de otros cultivos de cobertura de trébol es su rápido establecimiento y maduración, su preferencia por el clima fresco y su capacidad para crecer en suelos pobres, secos y arenosos, donde los tréboles perennes no se establecen bien.

El trébol carmesí prefiere el suelo arenoso, pero crecerá en cualquier suelo con buen drenaje. Sin embargo, no tolera la arcilla pesada ni las zonas encharcadas.

Cómo cultivar el trébol carmesí

El trébol carmesí como cultivo de cobertura se siembra en el sureste de Estados Unidos en otoño para que funcione como anual de invierno fijador de nitrógeno. Sus temperaturas óptimas de crecimiento están entre 40 y 70 F. (4-21 C.). Las plantas de trébol carmesí prefieren los climas frescos y se mueren con el calor o el frío extremos.

En los climas fríos del norte, el trébol carmesí se puede cultivar como un cultivo de cobertura anual de verano, sembrado en primavera tan pronto como haya pasado el peligro de las heladas. Debido a su atractivo para los polinizadores y a su capacidad de fijación de nitrógeno, el trébol carmesí es una excelente planta de compañía para los árboles frutales y de frutos secos, el maíz y los arándanos.

Cuando se cultiva el trébol carmesí en los pastos como planta forrajera para el ganado, se sobre siembra entre las hierbas a finales del verano o en otoño para proporcionar alimento al ganado durante los meses de invierno. Como cultivo de abono verde, puede producir unas 100 libras de nitrógeno por acre (112 kg./ha.). Se puede cultivar solo en rodales puros, pero las semillas de trébol carmesí se mezclan a menudo con avena, ryegrass u otros tréboles para plantaciones diversificadas.

En el jardín de casa, las plantas de trébol carmesí pueden corregir los suelos agotados de nitrógeno, añadir interés invernal y atraer a los polinizadores.