Pilar de luz

Esquema de formación de los pilares de luz

Dado que se producen por la interacción de la luz con los cristales de hielo, los pilares de luz pertenecen a la familia de los halos. Los cristales responsables de los pilares de luz suelen estar formados por placas planas y hexagonales, que tienden a orientarse más o menos horizontalmente al caer en el aire. Cada lámina actúa como un diminuto espejo que refleja las fuentes de luz que se sitúan adecuadamente debajo de ella (véase el dibujo), y la presencia de láminas a distintas alturas hace que el reflejo se alargue verticalmente en forma de columna. Cuanto más grandes y numerosos sean los cristales, más pronunciado será este efecto. (Más raramente, los cristales en forma de columna pueden causar también pilares de luz. Cuando hace mucho frío, los cristales de hielo pueden quedar suspendidos cerca del suelo, en cuyo caso se les denomina polvo de diamante).

A diferencia de un haz de luz, un pilar de luz no se encuentra físicamente por encima o por debajo de la fuente de luz. Su apariencia como línea vertical es una ilusión óptica, resultado de la reflexión colectiva de los cristales de hielo; pero sólo los que están en el plano vertical común, dirigen los rayos de luz hacia el observador (Ver dibujo). Esto es similar a la visión de una fuente de luz sobre una masa de agua. Las ondulaciones en la superficie del agua reflejan la fuente de luz en muchas direcciones, y las que resultan estar dirigidas al observador, se combinan para formar una línea brillante que apunta hacia la fuente de luz.