Impactos cerebrales: Reconocer las señales, controlar los riesgos
On noviembre 9, 2021 by adminROCHESTER, Minnesota – Los accidentes cerebrovasculares son la cuarta causa de muerte y la principal causa de discapacidad en Estados Unidos. El número de febrero de Mayo Clinic Health Letter incluye un informe especial de ocho páginas sobre los accidentes cerebrovasculares, en el que se abordan los factores de riesgo, la prevención, las señales de advertencia y las opciones de tratamiento.
A continuación, algunos aspectos destacados:
Qué ocurre: Un ictus se produce cuando el suministro de sangre a partes del cerebro se altera repentinamente. El noventa por ciento de los accidentes cerebrovasculares son isquémicos. Se producen cuando las arterias del cerebro se estrechan u obstruyen, lo que provoca una grave reducción del flujo sanguíneo. Igualmente graves, aunque menos comunes, son los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos, que se producen cuando un vaso sanguíneo del cerebro estalla o se produce una hemorragia en la arteria del cerebro. Ambos tipos de ictus pueden provocar la muerte o el daño de las células cerebrales, lo que provoca cambios temporales o permanentes en la mente y el cuerpo.
Señales de advertencia: Los síntomas pueden aparecer repentinamente y a veces duran poco tiempo. Pueden presentarse en diferentes combinaciones. Los síntomas tradicionales incluyen entumecimiento, debilidad o parálisis en un lado de la cara o del cuerpo; dificultad para hablar o problemas para entender a los demás; visión borrosa, disminuida o doble; mareos, problemas para caminar o pérdida de equilibrio; y aparición rápida de un fuerte dolor de cabeza.
Tratamiento de urgencia: El éxito del tratamiento depende de la rapidez. Uno de los medicamentos más eficaces para el ictus isquémico debe administrarse en las 4,5 horas siguientes al inicio del ictus.
Actos isquémicos transitorios: Un accidente isquémico transitorio (AIT), a veces llamado miniaccidente cerebrovascular, es un breve episodio de síntomas similares a los del accidente cerebrovascular. Al igual que un ictus isquémico, un AIT se produce cuando un coágulo o una placa bloquea el flujo sanguíneo a una parte del cerebro. El bloqueo es temporal y los síntomas suelen desaparecer en una hora. Algunos síntomas pueden durar unos minutos. Pero los síntomas fugaces no deben ignorarse. Es posible estar sufriendo un ictus incluso cuando los síntomas desaparecen. Cualquier persona con síntomas de ictus debe buscar atención de urgencia.
Factores de riesgo: Algunos factores de riesgo no pueden cambiarse. Los antecedentes familiares desempeñan un papel y también la edad. El riesgo de ictus se duplica en cada década después de los 55 años. Los hombres tienen mayor riesgo que las mujeres. Los negros americanos son más propensos a sufrir ictus que otros grupos étnicos. La diabetes no controlada, las enfermedades cardíacas y la apnea obstructiva del sueño aumentan el riesgo de ictus. Los factores de riesgo controlables son la hipertensión, los niveles de colesterol poco saludables, el consumo excesivo de alcohol y la inactividad.
Un segundo ictus: Un superviviente de un ictus tiene un mayor riesgo de sufrir un segundo ictus. En un plazo de cinco años, el 24 por ciento de las mujeres y el 42 por ciento de los hombres sufrirán otro.
Prevención: Los accidentes cerebrovasculares y los accidentes cerebrovasculares recurrentes a menudo pueden evitarse reduciendo los factores de riesgo y sometiéndose a un tratamiento preventivo. Es aconsejable hablar con un médico sobre los riesgos personales de ictus y las estrategias de prevención.
Mayo Clinic Health Letter es un boletín mensual de ocho páginas con información fiable, precisa y práctica sobre la salud y las noticias médicas de hoy. Para suscribirse, llame al 800-333-9037 (gratuito), extensión 9771, o visite Mayo Clinic Health Letter Online.
Contacto con los medios de comunicación: Ginger Plumbo, 507-284-5005 (días), [email protected]
Deja una respuesta