¿Estás haciendo la ducha de eucaliptos de la manera correcta?

Un efecto secundario de la mudanza de un apartamento que compartías con alguien que conociste en Craigslist y de la mudanza a un apartamento con tu compañero de vida es que tu estación en el ecosistema de la decoración del hogar aumenta. El cuarto de baño, en particular, es ahora una producción de Ashley Weatherford; su servidor es el director, la estrella y el escenógrafo de esa habitación sin ventanas. He cambiado todos los accesorios y herrajes de níquel por otros de color negro mate, el cubo de basura es esta monada de CB2 y el jabón de manos es lo que yo diga.

¡Pero la ducha! Esa es la mejor parte. He cedido a esas sirenas de Pinterest y he colgado unos eucaliptos sobre la alcachofa de la ducha. Hace casi todo lo que dice internet: se ve bien y huele bien, ¡todo el tiempo! Una de las esteticistas favoritas de ITG, Joanna Czech, me ayudó con el arreglo (y por ayudar me refiero a que publicó una guía en Instagram para sus 39.000 seguidores…). Y luego Emily vio el post, lo compartió con Anna y conmigo, y aquí estamos.

Resulta que colgar eucaliptos en la ducha requiere un poco más de esfuerzo que, bueno, colgar eucaliptos en la ducha. Tienes que martillar esas hojas ($3.99 de Trader Joe’s) en una tabla de cortar primero para que el burbujeante aroma del eucalipto fluya y prospere. O bien, puedes pasar por encima de ellas un rodillo, una botella de vino, una lata de sopa… cualquier cosa que sea pesada y esté a mano. Después, Joanna mete su eucalipto en un jarrón y se lo lleva a la ducha, pero me parece una persona que no es tan torpe como yo, así que yo sujeté el mío a la alcachofa de la ducha con un coletero. Dejé correr el agua caliente como dijo Joanna, y dejé que el vapor levantara más ese aroma a menta, limón y pino. Y… eso es todo; ha nacido un spa forestal urbano. Me espera al menos una semana de aire fresco perpetuo en el baño (cuando le envié un correo electrónico a Joanna, me dijo que el aroma es fuerte durante unos cinco a siete días). Hasta que lo cambie por el de lavanda (¡calmante!), el de menta (¡estimulante!) y el de romero (¡italiano!). Una ensalada de ducha si alguna vez hubo una.

-Ashley Weatherford

Foto vía ITG