El ex QB de los Chiefs, Joe Montana, se arrepiente de haberse retirado tras la temporada de 1994

¿Qué hubiera pasado si Joe Montana hubiera tenido una oportunidad más de llevar a los Kansas City Chiefs a un título de la Super Bowl?

Hoy, Montana reveló que hubiera deseado quedarse en Kansas City en 1995 en lugar de retirarse. En una entrevista exclusiva con Mackenzie Salmon, presentadora del estudio de USA TODAY Sports, Montana reveló que se arrepiente de haberse retirado cuando lo hizo.

«Bueno, si no me hubieran reemplazado el hombro, podría seguir jugando a los 64 años», bromeó Montana.

Pero realmente las lesiones fueron el eje de la decisión de Montana. A los 39 años, cuando Montana decidió retirarse, su cuerpo había recibido una paliza. Es lo que cabía esperar después de 16 temporadas en la NFL en la época en la que jugó. Mientras que el espíritu estaba dispuesto para Montana, la carne era débil y su cuerpo simplemente no podía soportarlo más.

«Incluso a día de hoy miro hacia atrás y me arrepiento de haber dejado los Chiefs incluso con un año de contrato», dijo Montana a Salmon. «Pero fue más una cosa física para mí. Las lesiones que tuve -la conmoción cerebral que sufrí el año anterior- fue realmente una de las peores que tuve. Al ver a mi familia y las edades de mis cuatro hijos, me estaba perdiendo muchas cosas con ellos. Realmente quería ser capaz de hacer cosas físicas, que, después de todo, todavía estoy limitado. Tomé la decisión correcta para mí en ese momento».

En definitiva, nunca sabremos cómo habría sido la historia si Montana se hubiera quedado. ¿Habría ocurrido el horrible juego de división de Lin Elliot en 1995? ¿Tendrían los Chiefs otro título de Super Bowl a su nombre? Las preguntas sobre lo que podría haber ocurrido son interminables. Sin embargo, viendo las razones por las que Montana tomó su decisión de retirarse, sería egoísta decir que hizo algo más que la elección correcta al alejarse del juego cuando lo hizo.