4 formas de aromatizar el café antes de prepararlo

Cuando se trata de café aromatizado, o bien te sientas a inventar excusas de que los sabores añadidos son sólo una forma de cubrir los sabores naturales del café, o bien te das el gusto de tomar ese café con leche de jengibre a mediados de diciembre. No estoy eligiendo ningún bando, pero sólo digo que hay algo que decir sobre ese Pumpkin Spiced Latte en una crujiente mañana de otoño y ese café helado de arándanos que da en el clavo cada mes de julio.

La mayoría de los granos de café aromatizados tradicionalmente son el resultado de los aceites aromatizantes que se rocían y mezclan con los granos después del proceso de tueste. Sin embargo, no se trata de cualquier aceite. A veces, ciertos sabores requieren casi 100 compuestos diferentes para lograr el sabor deseado. Normalmente, los aceites aromatizantes de café se componen de sustancias químicas aromatizantes tanto naturales como sintéticas, y tenemos que agradecer a los químicos aromatizantes profesionales que elaboren estas pociones mágicas.

La salud y la forma física están en auge, así que, naturalmente, todos buscamos una alternativa más sana y natural para conseguir el sabor que deseamos. Dejemos que los pequeños y sucios secretos salgan a la luz.

Aquí tienes algunas formas de añadir sabor a tu café.

1. Añada especias directamente a los posos del café.

¡Esto es fácil, sencillo y casi sin calorías! Especias como el cardamomo, la canela y la nuez moscada pueden espolvorearse directamente sobre los posos frescos de su cafetera. A medida que el agua caliente se filtre a través de los posos, el sabor de las especias se extraerá en su taza.

2. ¡Dele sabor a sus granos!

Conserve sus granos de café con especias enteras. Mezcle sus especias favoritas en los granos. (nuez moscada entera, clavo, canela en rama, etc.) Al hacer esto, las especias se infundirán gradualmente directamente en los granos. Cuanto más tiempo las mantenga mezcladas, más pronunciado será el sabor.

3. Añada aceites de café a sus granos.

Como se ha dicho anteriormente, la mayoría de los químicos aromatizadores mezclan aceites de café. Igualmente, con cualquier aceite aromatizante que tenga, dé a sus granos una ligera ducha y déjelos en remojo antes de molerlos. Cuanto más tiempo estén en remojo, más fuerte será el sabor.

4. Póngase un poco juguetón, añada un poco de whisky.

¡Vierta su bourbon favorito en una jarra y añada sus granos de café! Agítalo bien, colócalo en un lugar fresco y oscuro durante unas 24 horas y prepara esa m*erda. No hay nada como el whisky sin resaca.

¿Eres de los que beben un café caliente picante? ¿O te gusta un calmante y reconfortante café de vainilla? Dime, ¿cuál es tu sabor?

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